Acto 1. Desarrollismo y sed de materias primas y energía.
A finales de los 60, tras dos décadas de reconstrucción e industrialización, Occidente y Japón consumen más materias primas y petróleo que nunca. EEUU demanda un tercio de la energía mundial. Europa va justo por detrás. El comercio de estos recursos se ha convertido en una de las actividades económicas más lucrativas.
En 1963, año en el que Kennedy sería asesinado y comenzaban en España las emisiones de televisión en color, aterriza en Madrid con veintinueve años Marc Rich, el flamante director de Philip Brothers en España.
Marc Rich nació en 1934 en una familia judía en Amberes, Bélgica. Sus padres emigraron con él a los Estados Unidos en 1941 para escapar de los nazis. Su padre abrió una joyería en Kansas City, Missouri, y luego trasladó a la familia a Queens, Nueva York, en 1950, donde fundó una empresa que importaba yute de Bengala para hacer sacos de arpillera. Más tarde montó un negocio de comercialización de productos agrícolas y ayudó a fundar el Banco Boliviano Americano S.A.
Rich asistió a la escuela secundaria en la Escuela Preparatoria Rhodes en Manhattan. Más tarde, asistió a la Universidad de Nueva York, pero abandonó después de un semestre para trabajar en el departamento de correos de Philip Brothers donde conoció a Pincus Green.
Pincus Green nació en una familia judía ortodoxa, séptimo de ocho hijos, y creció en Flatbush, Brooklyn. Su padre era distribuidor de confitería. De joven, Green asistió a escuelas parroquiales judías, pero abandonó la escuela secundaria para mantener a su familia cuando tenía 16 años. Así que en 1953, a los 17 años, consiguió trabajo en el departamento de correos de Philip Brothers.*
*“En la década de 1950, Philip Brothers (hoy Philbro) era una importante empresa de comercio de metales y materias primas con sede en Nueva York. La compañía se especializaba en la compra y venta de metales como el cobre, el plomo y el zinc, y también negociaba en productos básicos como el café y el cacao. Durante esta época, Philip Brothers se enfocó en expandir su alcance global, estableciendo sucursales y oficinas en todo el mundo para aprovechar las oportunidades en los mercados extranjeros. La empresa también se destacó por su experiencia en el manejo de riesgos y su capacidad para adaptarse rápidamente a los cambios en los mercados mundiales. En términos de cultura empresarial, Philip Brothers era conocida por su enfoque en la ética y la integridad. La empresa insistía en la importancia de construir relaciones a largo plazo con sus clientes y proveedores, y se esforzaba por mantener altos estándares de conducta en todas sus operaciones comerciales.”
Mientras reparten el correo por los despachos de la compañía en 120 Broadway, New York, NY 10004, EE. UU. en pleno distrito financiero, Marc y Pincus se hacen amigos. Son listos y ascienden rápidamente en la compañía.
Pincus tira por la logística y el transporte naviero de materias mientras que Marc acaba encargándose del comercio de mercurio Hg. Pero ¿qué es el mercurio, para qué se emplea, qué países disponen de este mineral? A finales de los 60´s esta información aún no circula libremente por internet y hay que buscarse la vida e investigar.
Rápidamente Rich establece conexiones entre proveedores en Bolivia, Venezuela, Cuba… y las industrias que demandan esta materia. Marc aprende rápido, mucho, y aprende a hablar español.
Anécdota: en ese contexto conoce a Abbas Gokal, un empresario iraní co-fundador junto a su hermano de Pakhoed Trading, de una importante empresa minera vinculada al régimen de Palevi, que llama a la puerta de Philip Brothers para ofrecer cromo, CR.
Ludwig Jesselson, presidente de la compañía, se fija en Rich. Admira su capacidad excepcional para identificar oportunidades en el mercado de materias primas, sus habilidades de negociación y su astucia empresarial. Rich se convierte pronto en su protegido.
Rich se casa con Denise Eisenberg, jóven heredera de un imperio textil basado en la fabricación y venta de zapatos de seguridad para trabajadores industriales Desco Shoe Corporation.
¿Qué pasa mientras tanto por ahí fuera? no mucho, quizás el mayor episodio de tensión de la guerra fría; la crisis de los misiles y poco más. Pero Marc y Denise viven en un apartamento de lujo en New York y él se desplaza en un MG descapotable por Manhattan camino de Wall Street. La vida es bella!
En esa época Jesselson propone a Rich un nuevo reto: expandir el negocio de la compañía y dirigir la oficina de Phillip Brothers de Madrid.
Rich aterriza en Barajas. Mientras un régimen dictatorial reprime a porrazos cualquier disidencia política o social en España.
Pero será en Madrid,donde Rich va a descubrir que los gobiernos de Israel e Irán negocian en secreto la construcción de un oleoducto que uniría ambos países. El recién proclamado Sha Mohamed Reza Pahlevi tiene serias dudas sobre el proyecto, pero el 5 de junio de 1967, en represalia por el apoyo de Occidente a Israel durante la Guerra de los Seis Días, el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser decide cerrar el Canal de Suez. No se reabrirá hasta 8 años más tarde.
La decisión de Nasser perjudica seriamente el transporte de crudo Iraní a occidente, que ahora debe rodear toda África, y acaba empujando a Pahlevi a convertirse en socio de Golda Meir en El Eilat Ashkelon Pipeline Co (EAPC), un oleoducto de 750 km que conecta el Mediterráneo con el Mar Rojo donde descargan los cargueros de crudo iraní.
Desde Madrid, Marc Rich, que tiene relaciones tanto con Israel como con Irán a través de su conocido Abbas Gokal que ahora se dedica también al petróleo, percibe que a pesar del riesgo y desconocimiento del modelo de negocio hay buenas oportunidades en el mercado del crudo que su empresa no ha explorado. Y por su cuenta y riesgo se embarca en una primera aventura de adquisición de petróleo… pero sin comprador asegurado.
Sus jefes entran en cólera y le obligan a deshacerse del activo inmediatamente, incluso perdiendo dinero. Una auténtica humillación para un mercader!
Pero Rich lo tiene claro y entiende que una parte del petróleo que fluirá por el Eilat Ashkelon podría acabar pasando por sus manos. Rich explota sus vínculos de alto nivel con Israel e Irán, países en este momento no precisamente amigos aunque socios necesarios. Esta vez Rich propone un plan a su empresa y se asegura un cliente: Franco.
Rich se desenvuelve bien en Teherán y acaba haciéndose con una parte del petróleo Iraní que fluirá por Israel hasta el Mediterráneo.
La operación sale redonda. Philip Brother obtiene interesantes beneficios y Marc reclama su recompensa en forma de 500.000 dólares anuales para él y su colega Pincus.
Pero Jesselson su otrora padrino se rasca el bolsillo y reflexiona; un bonus tan exagerado alteraría el modelo de retribución y recompensa de su compañía así que Jesselson se lo deniega.
Rich, furibundo, abandona Philip Brothers de un portazo.
Acto 2. De start up a emporio financiero.
Rich deambula furioso por su residencia de Somosaguas, una flamante urbanización de lujo en las afueras de Madrid y comparte su frustración y planes con varios colegas de Philip Brothers. Ha decidido fundar su propia compañía Marc Rich + Co AG. a la que no dudan en unirse ni un segundo socios como Pincus “Pinky” Green, un auténtico genio en operaciones globales de transporte naviero, Jacques Hachuel que pone 1M$ -casi la mitad de la inversión-, John Peter Trafford -asistente de Rich-, que tiene que vender su coche para participar en la operación, y Alec R. Hackel que se convierte en el director de la nueva compañía con sede en Zug, cantón Suizo especialmente interesante por razones fiscales.
Entre los cinco convencen a una importante cartera de clientes para que abandonen Philip Brothers y se unan ellos a través de Marc Rich + Co AG. y comienza una operación en busca de materias primas y nuevos proveedores y clientes a nivel mundial.
Los cinco socios se reparten las tareas; Marc y Pincus operarán desde New York y Madrid, Trafford desde Londres aunque residirá en Madrid, Hachuel desde Madrid, Haeckel dirigirá la empresa desde Zug, Suiza.
El objetivo de Marc Rich + Co AG. es establecer grandes operaciones de trueque internacional a tres bandas; la empresa identifica países financieramente pobres pero con interesantes recursos naturales; petróleo, aluminio, azúcar, oro, cereales… y busca clientes para estas materias.
La visión estratégica de Rich y sus socios, su desmesurada ambición y su desapego ético a la hora de relacionarse y comerciar con determinados regímenes, les abre la puerta de negocios en confines geográficos… y éticos.
Las naciones industrializadas compiten a codazos por materias primas y energía. Y en ese juego de no querer saber dónde van o de dónde vienen las cosas, los MERCADERES se convierten en magos de la alteración creativa de incómodas denominaciones de origen.
Por otra parte, cuando sólo un 5% del petróleo mundial escapa al control de las Siete Hermanas; Exxon, Mobil, Chevron, Gulf Oil, Texaco, Shell y British Petroleum, aparecen los MERCADERES con la cartera llena de billetes y triunfan entre vendedores y compradores mundiales que procuraban no hacer demasiadas preguntas sobre procedencia o destino del crudo.
Hay sed de petróleo, pocos escrúpulos y los MERCADERES plantean una idea disruptiva: comerciar con petróleo como con el resto de las materias primas; pagando al contado. Los mercaderes inventan el “spot market”. Pago al contado en esta fecha a tanto el barril.
El juego de mesa se llama “guerra fría” y las reglas pueden ser incómodas, claras o relativamente ambiguas. En una de las jugadas, los MERCADERES compran crudo iraní, que cambiaban de barco en Constanza, en el Mar negro -en la Rumanía de Ceaucescu beneficiada por un especial trato desde occidente-, y lo revenden a Golda Meier y a Franco.
En otra canjean petróleo saudí por una flota de Boeing 747. En otra salvan a Jamaica de graves desastres sociales ante la falta de suministro de energía desviando un petrolero de crudo al puerto de Kingston. Mientras, se aseguraban la producción de la bauxita jamaicana de los próximos siguientes 10 años.
Los MERCADERES tenían la determinación de los exploradores de las sociedades geográficas del siglo XIX. Buscaban negocios globales y no tuvieron ningún tipo de conflicto -¿o si?- en hacerlos con la Libia de Gadaffi, la Sudáfrica de Piet Botha, la Unión Soviética… Resulta que cuanto más cerca de las líneas rojas más oportunidades y lucrativo resulta el negocio.
Pincus, un auténtico genio del shipping, es fundamental por su impresionante talento para almacenar y procesar en su cabeza todos los datos relacionados con los transportes de la compañía, ubicando con precisión cada uno de sus barcos en cada momento sin necesidad de recurrir a la «Lloyd’s List». Su creatividad y conocimiento del negocio es clave para tomar decisiones rápidas y acertadas en momentos críticos.
Los MERCADERES celebran la lluvia de oro… negro!
Mientras, las siete hermanas y varios servicios secretos han empezado a ajustar la mira telescópica sobre Rich y sus socios y se preguntan; ¿Quién demonios son estos tipos? ¿Pretenden cambiar las reglas del juego? ¿Son capaces de poner en riesgo la estabilidad de un sistema? Un modelo en el que el crudo fluye a buen precio desde países del tercer mundo garantizado por acuerdos a futuro que reporta unos suculentos beneficios a las “hermanas” que no desean compartir.
Ciertas reglas habían cambiado desde la guerra de Yom Kipur del 6 de octubre de 1973. En un acto de represalia por el apoyo occidental a Israel, los países árabes exportadores de petróleo, un grupo importante dentro de la OPEP, habían restringido el suministro de crudo a Occidente.
Los países productores de petróleo, han comprendido su enorme poder geopolítico mientras un inocente primer mundo descubre su excesiva dependencia de los combustibles fósiles. El precio del barril y la inflación se disparan.
Pero los MERCADERES siguen disponiendo de barra libre de petróleo iraní vía Israel que revenden a Israel, España, Sudáfrica… la lista de espera es larga!
Los MERCADERES hacen también negocios con la Unión Soviética. La agencia de exportación Raznoimport les vende la mayor parte de los limitados metales estratégicos que el país pone a la venta. Además de metales, los MERCADERES se quedan igualmente con parte del petróleo sovietico…
Rich y sus socios comienzan a amasar una inmensa fortuna!
Con los bolsillos llenos de petrodólares, los MERCADERES disfrutan de abundancia y de un estilo de vida original y muy diferente al de una aristocracia española rancia que todavía se regocija en cacerías, toros, ferias rocieras…
Los MERCADERES transforman sus beneficios en espectaculares mansiones y opulentas propiedades inmobiliarias en Marbella, New York, St. Moritz, Zurich, disfrutan con sus sensacionales deportivos de alta gama, sus espléndidos yates y modernos jets privados, disfrutan del deporte y de fabulosos viajes alrededor del mundo, organizan fiestas exclusivas y participan activamente en causas de apoyo a el estado de Israel, que les proporciona negocio y seguridad personal global.
El negocio progresa adecuadamente. En 1976 Marc Rich + Co AG. cuenta con 15 “traders” y sus beneficios aumentan año tras año: 14M$ en 1974, 50M$ en 1975, más de 200M$ entre 76 y 78. A finales de los 70 Marc Rich + Co AG. movía más crudo al día -un millón de barriles- que el estado de Kuwait.
Los MERCADERES expanden sus negocios con el petróleo de Ecuador, Nigeria, la bauxita Jamaicana… metales del Congo… Pincus intercambia petróleo saudi por una flota de Boeing 747 mientras baila y se explaya como un “mad man” por la oficina de New York mientras sus colegas le aplauden enfervorecidos mientras fuman y brindan con gin tonics y algunos se meten un tirito en el baño.
Los MERCADERES están en la cresta de la ola y la pasta fluye de manera… desmesurada, obscena… Pero tanto dinero no se puede gastar en cien vidas, aunque diseñes y construyas, como Trafford, un yate de 50 metros de eslora de un sólo mástil para viajar por el caribe y otros paraísos costeros o fiscales.
Los MERCADERES diversifican inversiones, apuestan por la filantropía que les otorga estatus social y favores a futuro y por el arte que les provee de más estatus aún y encima les reporta valor y plusvalías. E impactan de lleno en el mundo de la cultura que se rinde ante estos Medici contemporáneos.
Un par de momentos: Hachuel se adelanta a la movida madrileña produciendo a capricho las primeras películas de Almodóvar, alberga en su casa a Warhol (durante un año) y a Basquiat, mientras Alaska ameniza sus fiestas con sus canciones posmodernas.
Trafford construye la mansión más opulenta de la Moraleja en Madrid que revende a los Thyssen y donde se firmarán los acuerdos que traerán la colección a España. Su ex-mujer Carmen Gimenez una de las mayores expertas mundiales en arte contemporáneo se encargará de diseñar sus respectivas colecciones. Camilo José Cela se convierte en presidente del consejo de la Fundación Marc Rich en España en la que Rich invirtió más de 135M$ en dos décadas contribuyendo a la cultura, la educación y varios programas de salud israelíes que honran las Humanidades y las Ciencias Sociales en la Universidad de Tel Aviv, la Orquesta Filarmónica de Israel, la Cinemateca en los teatros Tel Aviv Cameri… (Chascarrillo: más adelante Rich llegaría incluso a adquirir 20th Century Fox que revenderá a Rupert Murdoch.)
Y como aún tenían muchísimo más dinero, tuvieron que dedicar un gran esfuerzo creativo y de ingeniería financiera para distribuirlo y ocultarlo alrededor del mundo.
En una era pre internet, en el que las operaciones se coordinaban en teleconferencias -a cobro revertido-, telegramas y telex y moviendo el dinero en maletines llenos de pasta cruzando a Suiza o a bordo de veleros por el caribe en busca de puerto fiscal amigo, los Mercaderes fueron auténticos maestros en evasión fiscal. En cualquier caso, una vez más, “Life is beautiful”. Paradójicamente en TVE se emite la primera temporada de Dallas.
Pero el 1 de Noviembre de 1979, el clérigo chiíta, ayatolá Ruhollah Jomeini encabeza una revolución islamista de corte teocrático en Irán (25 años después de que la CIA derrocase a un gobierno democrático para imponer al Sha, favorable a sus intereses). El nuevo Irán, uno de los principales países productores de petróleo, se convierte de un día para otro en un enemigo imprevisible.
Los MERCADERES entran en pánico!
Acto 3. La justicia VS los mercaderes.
Pincus Green, kipá sobre la cabeza y Torá bajo el brazo, viaja en clase turista camino de Teherán mientras el país se va transformando día a día en una república islámica.
Teherán es probablemente el peor lugar del mundo para un comerciante judío con pasaporte americano. La embajada de EEUU en Teherán ha sido asaltada por una turba de encolerizados estudiantes que retienen a casi toda la legación. Pero los ayatolás necesitan divisas para financiar su revolución y Pincus se las garantiza a cambio de su petróleo.
Los MERCADERES celebran la gestión de Pinky y la reapertura del grifo de crudo que seguirá a su disposición aunque con nuevas dificultades técnicas y más riesgo… pero con mayores beneficios.
¿Acaso no comprendieron Los MERCADERES la gravedad de seguir haciendo negocios con este nuevo Irán? La administración estadounidense se sintió profundamente ofendida por ello y decidió tomar represalias. Es probable que la bruja que consultaba Hachuel en New York antes de emprender cualquier negocio -mientras de paso se traía un Frank Stella de la Castelli- o algún agente del Mossad amigo, les advirtiera de que aquél combustible iraní con el que seguían traficando podía arder en cualquier momento.
La llama la prendió Sandy Weinberg, una especie de “Elliot Ness”, que desde la fiscalía de New York dió combustible a Rudolph Giuliani, entonces fiscal general del Estado, para promover en 1983 una gran causa judicial y mediática contra Rich y varios de sus comerciantes por violar el embargo a Irán. Rich fue considerado el mayor defraudador fiscal de la historia de América.
Rich entró en la lista -en la de Forbes nunca llegó a figurar por la dificultad de valorar su patrimonio- de las 10 personas más buscadas por el FBI y su orden de busca y captura se hizo efectiva internacionalmente.
Pero gracias a su guardia de seguridad pretoriana comandada por Avner Azulay, ex-jefe del Mossad y presidente de la fundación Marc Rich, pudo moverse por todo el mundo -salvo por EE.UU.- con total impunidad con su pasaporte español y la garantía de no ser extraditado. Eso no quita que escapara por el ventanuco del cuarto de baño de una pizzería de Zug (Suiza) cuando un periodista intentó hacerle una pregunta!
El tsunami judicial y mediático arrojó demasiada luz e información sobre los negocios de Rich y sus socios que se sintieron incómodos y de pronto inseguros. La cosa iba realmente en serio y puede que no sólo contra Rich. ¿Podrían convertirse ellos mismos en víctimas de la represalia judicial internacional y perderlo todo? ¿Seguiría Israel protegiendolos después de esto? Las tensiones afloran en el grupo de amigos y socios. El miedo deriva en reproches que súbitamente trascienden en navajazos de alto standing entre despachos de abogados internacionales y agentes y ex agentes secretos armados que pululan discretamente alrededor.
En cualquier caso el entorno de Rich promueve una campaña internacional con personalidades del mundo de la política, la empresa y la cultura, para solicitar su indulto a la administración estadounidense. En uno de sus últimos actos presidenciales en 2001, Clinton firma el embarazoso perdón 140 que libera a Rich de todos sus cargos.
Epílogo
A pesar de ello Rich nunca volvió a pisar EE.UU. renunciando a despedirse de su hija Gabrielle Rich Aouad, que murió de leucemia en 1996 en New York a los 27 años.
El viaje de Los MERCADERES que comenzó en amistad, trancurrió por arte, lujo, sexo, viajes, espías y traiciones, llegó a resentimiento, destino final con una última paradoja: hasta de los detritus de un emporio en desmoronamiento surge una fauna natural de mercaderes dispuestos a comerciar con los restos.
Pero esa es otra historia.
Fin.
